Rodeado de más de diez hectáreas de olivares centenarios de la finca y almazara L'Olinda, en la región Marche, este alojamiento se alza en un lugar de paz y tranquilidad absolutas. Un lugar virgen que, como tal, requería especial atención, sensibilidad y respeto por el entorno en la renovación del edificio principal. La fuerte relación entre construcción y naturaleza fue decisiva en las elecciones de diseño. El resultado fue un proyecto basado en los principios de la construcción ecológica y la sostenibilidad medioambiental, muy apreciados por los jóvenes propietarios.

Al tratarse de una nueva construcción y no de una renovación del existente, el proyecto fue capaz de combinar la tradición con lo nuevo, utilizando también formas y materiales de las últimas tendencias arquitectónicas. El ladrillo caravista de la fachada, por ejemplo, se construyó con ladrillos procedentes de la demolición de la granja original del siglo XIX y combina elegantemente con la madera blanqueada utilizada para el tejado y los techos, una elección que aligera el aspecto imponente de la estructura.

En el interior, la casa rural consta de una gran sala de doble altura, donde se realizan las catas de aceite, y cinco dormitorios llevan los nombres de otras tantas variedades de aceitunas de la región Marche: Carboncella, Coroncina, Raggia, Rosciola y Mignola. Cada sala es única en su estilo, con colores y papeles pintados característicos. El denominador común es el cabecero de la cama y la naturaleza de los muebles, sencillos pero refinados. Formas y detalles son esenciales y hacen resaltar los muebles antiguos hábilmente restaurados.

En el pasillo, el acceso a las habitaciones se ve realzado por los espectaculares batientes de los marcos para puerta enrasada ECLISSE 40, que dan movimiento a este espacio distributivo. Sus perfiles inclinados y su color claro evocan las formas de los edificios del pasado y una sensación de solemnidad arquitectónica, presentando la tecnología más avanzada tanto en su papel funcional como en su presencia estética. En palabras de la diseñadora, la ingeniera Francesca Mazzarin, del Studio Bilding: "Mi idea es que el diseño y la imagen de estas puertas sean innovadores, elegantes, impactantes, y que encajen bien no sólo en estructuras residenciales, sino también en instalaciones de hostelería como ésta. Mi elección vino dictada tanto por el deseo de incluir elementos nuevos en el proyecto, que dieran frescura al lugar, como por la impresión de que estos nuevos marcos contribuirían a crear el claroscuro y la perspectiva adecuados en los espacios en los que se insertaran, subrayando la limpieza de los volúmenes."

La atención prestada al aislamiento ha permitido al edificio obtener el nivel de certificación A+ de la norma nacional. El sistema de calefacción funciona con biomasa y utiliza huesos de aceitunas, que se recuperan en el proceso de transformación del aceite. La casa rural y la almazara son autosuficientes energéticamente gracias a un sistema fotovoltaico construido en el tejado de la almazara.
Por último, el sistema de domótica optimiza la gestión térmica y eléctrica del edificio, el riego de los espacios circundantes y la seguridad de los accesos, dejando libertad a los huéspedes para entrar y salir de forma totalmente independiente. Un sistema versátil que también permite gestionar la casa rural a distancia, ya que los propietarios no viven en el edificio.
El resultado es un entorno informal, pero con todas las comodidades, donde es fácil sentirse como en casa, donde ningún detalle se ha dejado al azar.


Ubicación: San Marcello - ITALIA
Puertas abatibles a ras de pared: ECLISSE 40 para el acceso a las habitaciones y ECLISSE Syntesis Line Abatible para los baños privados

Architect

Eng. Francesca Mazzarini

  • ECLISSE 40

    ECLISSE 40

    ECLISSE

  • ECLISSE 40

    ECLISSE 40

    ECLISSE

  • ECLISSE Syntesis Line Abatible

    ECLISSE Syntesis Line Abatible

    ECLISSE

  • ECLISSE Syntesis Line Abatible

    ECLISSE Syntesis Line Abatible

    ECLISSE